9 min read · April 08, 2024
By Michael Schwartz
Las cuentas por cobrar son el dinero que un cliente debe a una empresa por bienes o servicios entregados pero aún no pagados. Es un componente esencial de la salud financiera de una empresa y puede afectar a su flujo de caja. En este artículo exploraremos qué son las cuentas por cobrar y cómo funcionan, sus componentes, gestión, evaluación y diferencias entre las cuentas por cobrar y las cuentas por pagar.
Las cuentas por cobrar, también conocidas como AR, son una cuenta de activo circulante que registra una cuenta por cobrar cuando un cliente adquiere un bien o servicio pero aún no lo ha pagado.
Cuando un cliente adquiere bienes o servicios de una empresa, se crea una factura en la que se especifica el importe adeudado y las condiciones de pago. Los plazos de pago pueden variar, pero suelen ser de 30, 60 o 90 días.
Una vez que el cliente recibe la factura, dispone de un plazo determinado para abonar el importe adeudado. Se considera que el cliente debe dinero a la empresa hasta que se pague la factura, y el importe adeudado figura como cuentas por cobrar.
Las cuentas por cobrar son un aspecto importante de las operaciones financieras de una empresa, ya que le permiten hacer un seguimiento del dinero que le deben sus clientes. Con las cuentas por cobrar, las empresas pueden controlar su flujo de caja, identificar los retrasos en los pagos y garantizar el pago puntual por parte de sus clientes. Gestionar eficazmente las cuentas por cobrar es crucial para la salud de la empresa y la satisfacción del cliente.
Una factura es un documento en el que se especifica el importe adeudado por los bienes o servicios entregados por la empresa a sus clientes. Describe los detalles de la transacción, incluidas las condiciones de pago.
Las condiciones de pago se especifican en la factura y se refieren al plazo en el que el cliente debe abonar la factura. Las condiciones de pago pueden oscilar entre 30 y 90 días, y las empresas deben asegurarse de que se cumplen estrictamente, para mantener unas buenas relaciones con los clientes y la tesorería.
El calendario de vencimiento de las cuentas por cobrar es un informe que enumera los saldos pendientes de todas las cuentas de clientes y los clasifica por el tiempo transcurrido desde el vencimiento de la factura. Este informe es esencial para determinar qué clientes deben dinero y cuáles están atrasados en el pago.
La gestión de la tesorería es fundamental para que las empresas funcionen con fluidez y eficacia. Una forma de garantizarlo es contar con un proceso eficaz de cobro de cuentas por cobrar que sea coherente y puntual. Este proceso implica el envío puntual de las facturas, el seguimiento de los pagos atrasados de los clientes y la aplicación de un plan de pagos para las cuentas vencidas.
El ratio de rotación de cuentas por cobrar mide cuántas veces se cobran las cuentas por cobrar en un periodo determinado. Un ratio alto indica que una empresa está cobrando sus cuentas por cobrar con rapidez, mientras que un ratio bajo sugiere lo contrario y es un indicio de posibles problemas de tesorería.
La morosidad se refiere a las cuentas por cobrar impagadas, que no pueden cobrarse. Puede afectar negativamente al flujo de caja de una empresa y debe minimizarse en la medida de lo posible. Las empresas pueden utilizar verificaciones de crédito y contratos para evitar las deudas incobrables y considerar la contratación de cobradores profesionales para ayudar a recuperar las deudas incobrables.
Las cuentas por cobrar figuran como activo circulante en el balance, lo que indica que se espera que se conviertan en efectivo en el plazo de un año. Las empresas deben evaluar sus cuentas por cobrar con regularidad para determinar si tienen suficiente efectivo para las obligaciones a corto plazo, como el inventario, las nóminas y los pagos de alquiler.
El balance ofrece una instantánea de la situación financiera de una empresa, enumerando sus activos, pasivos y patrimonio neto. Las empresas pueden examinar el saldo de las cuentas por cobrar en el balance para determinar cuánto dinero se les debe y cuánto necesitan cobrar para mantener un flujo de caja saludable.
La liquidez se refiere a la capacidad de una empresa para hacer frente a sus obligaciones a corto plazo, como el pago de facturas y deudas. Evaluar las cuentas por cobrar es crucial para valorar la liquidez de una empresa, ya que permite conocer el dinero que se debe pero que aún no se ha pagado.
Las cuentas por pagar se refieren al dinero que una empresa debe a sus proveedores por bienes y servicios que han sido entregados pero aún no han sido pagados.
La principal diferencia entre las cuentas por cobrar y las cuentas por pagar es que las cuentas por cobrar son el dinero que se debe a una empresa, mientras que las cuentas por pagar son el dinero que una empresa debe a sus proveedores. Las cuentas a pagar figuran como pasivo corriente en el balance, ya que la empresa necesita pagar sus deudas en el plazo de un año, mientras que las cuentas a cobrar figuran como activo corriente, ya que la empresa espera cobrar el dinero en el plazo de un año.
En general, las cuentas por cobrar son una parte fundamental de las operaciones financieras de una empresa, y su gestión eficiente es esencial para mantener un negocio saludable. Las empresas pueden utilizar software de contabilidad como QuickBooks, Xero, Shopify o Wave para gestionar sus cuentas por cobrar y garantizar los pagos puntuales de sus clientes.
Michael Schwartz
Michael es el director general y cofundador de taxomate, una de las principales soluciones de software de integración contable de comercio electrónico.